Qué son los trastornos de ansiedad en los niños
Es normal que los niños tengan miedo. Pueden tenerle miedo a monstruos, fantasmas o a la oscuridad. A veces, el contenido de un libro o una película los asusta. En la mayoría de los casos, estos temores desaparecen con el tiempo. Pero los niños con trastornos de ansiedad sienten miedo frecuentemente. También pueden tener miedos que desaparecen por un tiempo y luego vuelven a aparecer una y otra vez. Esto puede causarles mucha angustia. Puede impedirles tener una vida normal. Los niños con trastornos de ansiedad pueden tener problemas con el sueño, el apetito y la concentración. Pueden tener problemas en situaciones sociales y en la escuela.
¿Qué es un trastorno de ansiedad?
Un trastorno de ansiedad hace que los niños se sientan aterrados en situaciones que normalmente no despiertan temor. Tal vez le tengan miedo a ciertas cosas, como los perros o las serpientes. O bien pueden temer a situaciones, como estar solos en la oscuridad. Su terror puede llegar al punto de impedirles salir de su casa.
¿Qué es el trastorno de ansiedad por separación?
Algunos niños pueden tener un trastorno de ansiedad por separación. Esto hace que sientan temor de estar lejos de su padre, madre u otro ser querido. Tal vez teman que les pasará algo malo. Quizá tengan miedo de no volver a ver a su familia nunca más. En algunos casos, los niños podrían negarse a ir a la escuela. Es posible que tengan síntomas físicos. Pueden incluir náuseas o dolor de estómago.
Cómo trabajar la ansiedad
La mayoría de los niños que sufren ansiedad pueden beneficiarse de la terapia conductual. Esta terapia la realiza un proveedor de atención médica profesional entrenado para trabajar con niños. Entre ellos, se incluyen los siguientes:
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Trabajador social clínico matriculado (LCSW, por su sigla en inglés)
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Psicólogo clínico (PhD)
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Enfermero profesional con práctica médica (APRN, por su sigla en inglés) con especialidad en salud mental
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Psiquiatra (MD)
La terapia se realiza por pasos. Una vez que el niño se sienta seguro con un paso, podrá pasar a otro. Esto ayuda a que el niño afronte gradualmente cada uno de sus temores. Por ejemplo, se le podría pedir al niño que se limite a pensar en el objeto que le causa miedo. De esta manera, puede darse cuenta de que no pasa nada. El siguiente paso es ver una imagen del objeto al que le teme. Más adelante, tal vez se enfrente a él cara a cara con ánimo y apoyo. Con el tiempo, el niño sentirá menos miedo. En algunos casos, pueden recetarse medicamentos para disminuir la ansiedad del niño.
Su función
En primer lugar, los padres deben hablar con el proveedor de atención médica del niño. Es necesario que el proveedor pueda descartar cualquier problema físico que pudiera causar los síntomas de ansiedad. Si el proveedor de atención médica diagnostica ansiedad, es posible que derive a su hijo y a la familia para que reciban ayuda. Puede enseñarle algunas maneras para mejorar la salud mental de su hijo. Con su amor y apoyo, puede ayudar a su hijo a superar sus miedos.
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