¿Qué son las úlceras por presión en el pie?
La fuerza o la fricción aplicadas a la planta del pie hacen que la piel se haga más gruesa. Este engrosamiento de la piel se llama callo. Si la piel se sigue endureciendo, el callo comienza a ejercer presión contra el pie. Un callo que ejerce presión en el pie puede dañar el tejido sano. Y provocar una úlcera por presión. A medida que el tejido sano va destruyéndose, se forma una úlcera. Estas pueden pasar de ser un punto enrojecido sensible a una herida infectada muy rápidamente.
Pero es posible que usted no sienta el dolor si tiene daño nervioso (neuropatía). Este problema de salud limita la sensación en los pies. La diabetes es una causa frecuente de la neuropatía.
Zonas calientes
Las zonas calientes enrojecidas de la piel son signos de presión o fricción. Representan una advertencia de que debe cuidarse los pies. Es probable que la zona caliente se convierta en una ampolla si no se alivia la presión. Si se deja sin tratar, esta ampolla puede transformarse en una herida abierta, un callo o una callosidad. Un callo es piel engrosada en la parte superior del pie. La cirugía para reparar los juanetes, los dedos en garra o los dedos en martillo puede disminuir las zonas calientes y las úlceras por presión. Los andadores para rodilla también pueden permitirle movilizarse sin ejercer presión en el pie afectado. El calzado terapéutico especial también puede ayudar a aliviar la presión.
Úlceras por presión
Si ejerce presión contra el pie, una dureza o callo puede destruir las capas internas de piel y grasa. Eso podría formar grietas o llagas. Estas heridas abiertas son úlceras por presión. Pueden permitir que una infección entre en el organismo. En algunos casos, la piel muerta, como un callo, puede cubrir una herida abierta. Esto puede dificultar la visión.
Úlceras por presión infectadas
Si las bacterias entran en la úlcera por presión, comienza la infección. Esto hace que el tejido más sano muera. La úlcera infectada podría comenzar a supurar. La supuración puede ser blanca, amarilla o verdosa. Algunas úlceras por presión infectadas sangran o huelen mal. La piel que rodea una úlcera por presión infectada puede enrojecerse o calentarse. Llame al proveedor de atención médica de inmediato si piensa que tiene una úlcera por presión infectada.
Deberá asistir a visitas de seguimiento con el proveedor de atención médica incluso si la úlcera por presión desaparece. Esto se debe a que la zona afectada queda debilitada. Puede haber deficiencias subyacentes que deben tratarse, como la mala circulación. La posibilidad de que se produzca una nueva úlcera por presión es alta. Controle sus pies todos los días para detectar signos de úlceras por presión. Use un espejo para revisar las plantas de los pies. Tome medidas si observa cambios.
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